Aunque parezca mentira, la normalidad es un concepto muy subjetivo. Y es que, para algunas personas, ser "normal" es vivir de acuerdo a ciertas convenciones sociales o a una serie de reglas impuestas por la sociedad. Mientras que para otras, ser "normal" es simplemente ser uno mismo, sin importar lo que los demás piensen o digan.
En cualquier caso, la normalidad es algo que todos buscamos, ya que es una forma de pertenecer a un grupo social. Y es que pertenecer a un grupo nos da seguridad, nos hace sentir parte de algo y nos ayuda a sentirnos aceptados. Por ello, muchas veces hacemos lo que sea necesario para ser considerados "normales".
Sin embargo, el problema surge cuando tratamos de definir qué es, exactamente, la normalidad. ¿Existe realmente una forma "correcta" de ser? ¿O es algo que varía de persona a persona? Estas son algunas de las preguntas que muchos se hacen a diario.
En mi opinión, la normalidad es algo subjetivo y, por lo tanto, difícil de definir. Creo que cada persona debe buscar su propio camino y seguir su propio instinto. Después de todo, ¿quién puede decirnos qué es lo "correcto" o lo "incorrecto"? Solo nosotros podemos saber lo que es mejor para nosotros.
En conclusión, creo que la normalidad es algo que varía de persona a persona. Cada uno de nosotros debe seguir su propio instinto y buscar su propio camino. Solo así podremos ser felices y encontrar la verdadera satisfacción en la vida.