Los trabajadores comunitarios de España requieren una serie de requisitos para trabajar en el país. En primer lugar, deben ser ciudadanos de la Unión Europea, Islandia, Liechtenstein, Noruega o Suiza. Además, deben tener entre 18 y 65 años de edad y poseer un permiso de residencia válido en España.
En segundo lugar, los candidatos deben cumplir con el requisito de hablar español de forma nativa o tener un nivel de español equivalente al C1 del Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas. También se requiere que los candidatos tengan un buen nivel de inglés, ya que muchas de las tareas se realizarán en este idioma.
En tercer lugar, los candidatos deben tener una formación mínima equivalente a la ESO, así como experiencia previa en el trabajo con niños y/o jóvenes. También se requiere que los candidatos tengan disponibilidad para trabajar en horario de mañana, tarde o noche, así como los fines de semana y festivos.
Por último, se requiere que los candidatos cumplan con los requisitos médicos y psicológicos establecidos por la Ley. Los candidatos deben someterse a una serie de pruebas médicas y psicológicas antes de iniciar el trabajo.