La tarjeta sanitaria europea (TSE) es un documento personal que acredita que la persona que lo porta tiene derecho a recibir una serie de prestaciones sanitarias durante un viaje temporal a un país miembro de la Unión Europea (UE), del Espacio Económico Europeo (EEE) o de Suiza. En concreto, con la TSE la persona puede recibir atención médica de urgencia, tratamiento programado o tratamiento a largo plazo que precise durante su estancia en el país de destino.
La TSE es gratuita y se expedirá a todos los ciudadanos de la UE, del EEE o de Suiza que lo soliciten, así como a sus familiares, independientemente de su edad o de si están cubiertos por un seguro médico privado. Para tramitar la TSE, los ciudadanos de la UE, del EEE o de Suiza deben ponerse en contacto con la entidad gestora de su seguridad social (por ejemplo, la mutua, el seguro público o el organismo estatal de seguridad social) y solicitarla. Aunque no haya ninguna obligación legal de hacerlo, se recomienda solicitar la TSE con anticipación para asegurarse de que estará lista antes de emprender el viaje.
La TSE es válida por un período de un año y puede renovarse automáticamente de forma periódica. No obstante, si el ciudadano deja de residir en el país de expedición de la TSE, deberá notificarlo a la entidad gestora de su seguridad social y solicitar una nueva TSE en el país de residencia.