La tarifa plana para autónomos se trata de una reducción en la cuota de la Seguridad Social que aplica a todos aquellos trabajadores por cuenta propia que perciban un determinado salario mensual. Dicha cuota se calcula en base al salario base de cotización (SBC), que es el salario mínimo que se toma en cuenta a la hora de cotizar. En el caso de los autónomos, el SBC es el salario mínimo interprofesional (SMI).
Para poder beneficiarse de la tarifa plana, los autónomos deben cumplir una serie de requisitos, entre los que se encuentran:
Los autónomos que cumplan estos requisitos podrán beneficiarse de una bonificación del 50% en la cuota que deben pagar a la Seguridad Social durante los primeros dos años de actividad. A partir del tercer año, la bonificación se reducirá al 25%.