Los jugadores de Splinter Cell: Conviction asumen el papel de Sam Fisher, un agente de la NSA que fue dado por muerto, y ahora se dedica a buscar a los responsables de la muerte de su hija. En esta entrega, los controles y la jugabilidad han sido simplificados con respecto a las anteriores, y ahora el juego se enfoca en la acción en lugar de en la sigilo. Sam puede atacar a sus enemigos de varias maneras, y también puede usar el entorno a su favor, ya que puede esconderse detrás de objetos y usarlos como cobertura. También hay un nuevo sistema de "mark and execute", que permite a Sam marcar a sus enemigos y luego ejecutarlos de un solo disparo. El juego también cuenta con un modo multijugador en línea.
El sistema de Splinter Cell: Conviction requiere un procesador de 3 GHz, 1 GB de RAM, 8 GB de espacio en disco duro, y una tarjeta de vídeo de 256 MB. El juego es compatible con Windows XP, Vista y 7.