Una SICAV es una Sociedad de Inversión de Capital Variable. Se trata de una sociedad anónima de inversión que reúne ahorros de muchos inversores para invertirlos en una cartera de valores. Las SICAV están reguladas por la Ley 35/1988.
Para poder constituirse como SICAV, se deben cumplir una serie de requisitos. En primer lugar, la SICAV debe tener un capital mínimo de 2.500.000 euros, que debe estar totalmente desembolsado. En segundo lugar, debe tener un patrimonio mínimo de 1.250.000 euros.
La SICAV debe estar gestionada por una entidad financiera autorizada por el Banco de España. También debe tener un consejo de administración y un comité de inversión.
Las SICAV pueden tener diferentes tipos de participaciones. Las participaciones ordinarias son las más comunes y se caracterizan por tener derechos de voto en las asambleas generales de accionistas. Las participaciones preferentes no tienen derechos de voto, pero tienen derechos preferentes a la distribución de los beneficios.
Las SICAV pueden invertir en una amplia variedad de activos, como acciones, bonos, fondos de inversión, etc.. La Ley 35/1988 establece un límite del 10% en la inversión en un mismo activo.