La reforma constitucional es el proceso mediante el cual se realizan modificaciones a la carta magna de un país. Para que se pueda llevar a cabo una reforma es necesario que se cumplan determinados requisitos, que varían de acuerdo al sistema político y al tipo de estructura constitucional de cada país. En algunos casos, se requiere el consenso de todos los partidos políticos; en otros, basta con que haya una mayoría simple o una mayoría calificada; y en otros, se puede llevar a cabo mediante un referendo.
En México, de acuerdo con lo establecido en el Artículo 135 de la Constitución, se pueden realizar reformas a la carta magna mediante una decisión conjunta de los Congresos de la Unión y de las Asambleas Legislativas de los estados, siempre y cuando dichas reformas sean aprobadas por una mayoría calificada de las dos Cámaras.
En el caso de que las reformas sean de carácter local, es decir, que solo afecten a un estado de la República, solo se requerirá la aprobación de la Asamblea Legislativa correspondiente.
En cuanto al procedimiento para llevar a cabo una reforma, éste deberá iniciarse mediante un dictamen de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, el cual deberá ser aprobado por las dos Cámaras antes de que se realicen las reformas.