Para cobrar la prestación por desempleo es necesario cumplir unos requisitos. Entre ellos, estar dado de alta en la Seguridad Social como demandante de empleo. Además, no puedes estar cobrando otra prestación por desempleo o haber rechazado una oferta de trabajo adecuada a tus circunstancias.
Otro de los requisitos es haber cotizado como mínimo 360 días durante los últimos siete años. Si no se cumplen estos requisitos, la prestación se reduce proporcionalmente. También se puede tener derecho a una prestación si se cotizó menos tiempo, pero en este caso la cuantía será inferior.
Para cobrar la prestación por desempleo es necesario que hayas estado en activo durante al menos 12 meses de forma ininterrumpida en los últimos 18 meses. Si no se cumple este requisito, la prestación se reduce proporcionalmente.
Además, es necesario que tu situación de desempleo sea voluntaria. Es decir, que no hayas sido despedido por causas objetivas o por faltas graves. También se puede cobrar la prestación por desempleo si se produce un cese de actividad por causas ajenas a tu voluntad.