Para tramitar un divorcio, es necesario llenar una solicitud de divorcio y presentarla ante un tribunal de familia. En la solicitud, se deberá incluir información sobre la relación matrimonial, como la duración del matrimonio y si hay hijos menores de edad. También se deberá especificar la causa del divorcio, que puede ser por mutuo acuerdo o culpa. Si se trata de un divorcio por culpa, se deberá demostrar que la otra persona es responsable de dañar la relación matrimonial. Si hay hijos menores de edad involucrados, se deberá especificar en la solicitud qué custodia se desea y si se solicita la pensión alimenticia. Una vez que se presenta la solicitud, se fija una audiencia de divorcio en la que se deberán comparecer las partes. En la audiencia, se escucharán las pruebas y se dictará la sentencia. Si las partes están de acuerdo con la sentencia, se firmará un acuerdo de divorcio. Si hay hijos menores de edad involucrados, también se firmará un acuerdo de custodia y pensión alimenticia. Una vez que se firman los acuerdos, se presentarán ante el tribunal para que sean aprobados y sellados. Después de que se aprueben y sellen los acuerdos, se notificará al cónyuge que se ha tramitado el divorcio y se le entregarán los documentos. El cónyuge tendrá que firmar los documentos y devolverlos al solicitante. Una vez que se reciben los documentos firmados, se presentarán ante el tribunal para que sean sellados y archivados. El divorcio quedará finalizado una vez que se sellen y archiven los documentos.