Para solicitar una copia de las escrituras de una propiedad, generalmente se requiere que el solicitante sea el propietario de la propiedad o tenga un poder notarial que le otorgue el derecho a solicitar la copia. En algunos casos, el solicitante puede ser el abogado o el representante legal del propietario. También se pueden requerir otros documentos, como una identificación válida con fotografía, una prueba de domicilio y un comprobante de pago de la tarifa de solicitud.
El proceso para solicitar una copia de las escrituras varía según el estado y el condado en el que se encuentre la propiedad. En algunos estados, se puede solicitar en línea a través del sitio web del registro de la propiedad. En otros estados, es necesario presentar la solicitud en persona o por correo.
La tarifa de solicitud también varía según el estado y el condado. En algunos lugares, la tarifa es de unos pocos dólares, mientras que en otros puede ser de hasta unos cientos de dólares. Si se solicita por correo, generalmente se requiere que se envíe un cheque o giro postal junto con la solicitud.
Una vez que se presenta la solicitud y se paga la tarifa, el registro de la propiedad realizará una búsqueda de las escrituras y, si se encuentran, las enviará por correo al solicitante. Si las escrituras no se encuentran, el registro de la propiedad puede proporcionar una certificación de no encontrarse las mismas, que es un documento oficial que indica que no se pueden encontrar las escrituras en el registro.