Para ser traductor, se requieren conocimientos linguisticos y de traducción. Es necesario tener una buena comprensión de los dos idiomas involucrados en la traducción, así como de su vocabulario. También se requiere habilidad para traducir de un idioma a otro de manera clara y precisa. Se requiere paciencia para poder trabajar con textos largos y complejos, y diligencia para asegurarse de que la traducción sea exacta.