Para ser oficial de justicia, se requiere ser mayor de 21 años, tener un diploma de educación secundaria y pasar un examen de capacitación. Además, es necesario tener una buena reputación, ser imparcial e idóneo para el cargo.
Los oficiales de justicia son responsables de notificar a las personas involucradas en un juicio de las audiencias y otros eventos relacionados con el proceso judicial. También tienen la responsabilidad de asegurarse de que las personas comparezcan a los juicios y de recopilar pruebas y documentos relevantes para el caso.
La imparcialidad es esencial para los oficiales de justicia, ya que deben tratar a todas las personas de manera igualitaria. También deben ser idóneos para el cargo, lo que significa que deben ser capaces de manejar el estrés y las presiones inherentes al trabajo.