Para ser fiador de un contrato de arrendamiento, se deben cumplir una serie de requisitos que son establecidos por la ley. En primer lugar, el fiador debe ser mayor de edad y tener plena capacidad de obrar. Asimismo, debe ser residente en España y no puede tener ningún impedimento para contratar. Además, el fiador no debe estar incluido en ninguna lista de morosos, como ASNEF o RAI. También es importante que el fiador tenga una buena situación económica y laboral, para así garantizar que podrá hacer frente a las obligaciones que se le exigen en el contrato. Por último, es necesario que el fiador no tenga ningún tipo de vinculación con el arrendador ni con el inmueble en cuestión.