Los requisitos para ser diacono católico son bastante estrictos. Para empezar, sólo los hombres pueden ser diáconos. También se espera que los candidatos a diácono sean solteros o, si ya están casados, que hayan vivido en castidad durante toda su vida matrimonial. Los diáconos también deben ser creyentes practicantes, y se espera que tengan una buena reputación tanto dentro de la comunidad católica como en la sociedad en general. Por último, los diáconos deben ser capaces de demostrar un compromiso con la Iglesia y sus enseñanzas, así como una vocación al servicio. Si cumples con todos estos requisitos, entonces puedes comenzar el proceso de candidatura a diácono.