Para obtener la residencia por arraigo social, es necesario que el solicitante cumpla con una serie de requisitos, entre los que se encuentran:
- Ser mayor de edad.
- Estar empadronado en el municipio donde se solicita la residencia, con una antigüedad mínima de cinco años.
- No haber sido condenado por un delito cometido con violencia o intimidación contra las personas.
- Estar en posesión de la Tarjeta de Identidad de Extranjero en vigor.
- No tener antecedentes penales en España ni en el país de origen.
- Estar al corriente de las obligaciones tributarias y con la Seguridad Social.
- No estar separado legalmente o en proceso de divorcio.
- Contar con un seguro de salud que cubra las necesidades médicas básicas.
- No tener pendiente de resolver ninguna petición de expulsión del territorio nacional.
- No estar en situación administrativa irregular.
Una vez cumplidos todos estos requisitos, el solicitante deberá presentar la documentación necesaria ante el Registro Civil, donde se tramitará la solicitud de residencia.