Los requisitos para recibir la ayuda de 200 euros son muy sencillos. Lo primero que necesitas es ser un trabajador por cuenta propia o autónomo que haya visto reducida su actividad como consecuencia del COVID-19. También puedes ser un trabajador por cuenta ajena que haya sido objeto de un ERTE por causas relacionadas con el coronavirus. En ambos casos, es necesario que tu reducción de actividad se haya producido entre el 14 de marzo y el 30 de abril de 2020. Otro requisito es que tu base de cotización a la Seguridad Social en 2019 haya sido inferior a los 5.000 euros.
Asimismo, para cobrar esta ayuda no se puede estar disfrutando del subsidio por desempleo. Tampoco se puede estar cobrando el Ingreso Mínimo Vital ni percibir una pensión contributiva por jubilación, invalidez o viudedad. Los beneficiarios de esta ayuda no podrán superar un patrimonio total que, junto con el de su cónyuge o pareja de hecho, no exceda los 300.000 euros. Y, por último, no se podrá estar en ninguna de las situaciones que impidan el acceso a subsidios o rentas mínimas.