Para poder cobrar el ingreso mínimo vital, el solicitante debe ser mayor de 23 años y no tener ingresos suficientes para mantenerse a sí mismo o a su familia. Además, debe estar empadronado en España y no tener otro tipo de ayuda por parte del Estado. Para los solicitantes mayores de 65 años, no se requiere que estén empadronados en España, pero sí deben demostrar que no poseen ingresos suficientes. También se requiere que el solicitante no tenga derecho a percibir otro tipo de ayuda por parte del Estado o de la Unión Europea.
Para solicitar el ingreso mínimo vital, el solicitante debe presentar una solicitud en persona en el Ayuntamiento de su lugar de residencia. La solicitud debe ir acompañada de un documento de identidad, un certificado de empadronamiento (si es mayor de 65 años, no se requiere), un certificado de renta y un certificado de situación laboral. Si el solicitante es menor de 23 años, también debe aportar un certificado de escolaridad.
Una vez que se haya presentado la solicitud, el Ayuntamiento tendrá que evaluar si el solicitante reúne los requisitos para cobrar el ingreso mínimo vital. Si se determina que el solicitante es elegible, se le asignará un importe mensual y se le enviará una tarjeta de crédito prepagada con el importe. Si el solicitante no reúne los requisitos, el Ayuntamiento le informará de las razones por las que no es elegible y le dará la oportunidad de solicitar una reconsideración de su solicitud.