La Asignación Universal por Hijo (AUH) es un beneficio otorgado por el Estado Nacional a aquellos niños y adolescentes de hasta 18 años de edad que, sin importar la situación económica de sus familias, tengan derecho a una pensión mensual. Este beneficio está regulado por la Ley de Asignaciones Familiares, que se encuentra en el decreto Ley 24.463. La AUH es un beneficio no contributivo, es decir, que no se requiere haber cotizado a la seguridad social para acceder a él.
Para cobrar la AUH, el niño o adolescente debe estar inscripto en el Registro Nacional de las Personas (RNP), tener su DNI al día y pertenecer a una familia con ingresos mensuales brutos inferiores a $5.000. En el caso de los niños, además, deben estar a cargo de sus padres o tutores y tener su partida de nacimiento. En el caso de los adolescentes, deben cursar estudios secundarios o capacitaciones laborales.
La AUH se cobra mensualmente y el monto que percibe cada beneficiario está determinado por el número de hijos a cargo. En el caso de un hijo, el beneficio es de $3.000; si son dos hijos, el monto asciende a $4.500; en el caso de tres hijos o más, el monto es de $6.000.
Los beneficiarios de la AUH son exentos del pago de impuestos a las ganancias y de las contribuciones sociales. Además, tienen derecho a los beneficios de la Asignación por Embarazo, el Subsidio por Maternidad o Paternidad y el Programa Protección por Desempleo.
Para cobrar la AUH, los beneficiarios deberán acreditar su identidad y presentar el DNI del niño o adolescente a cargo. En el caso de los niños, también deberán presentar la partida de nacimiento. En el caso de los adolescentes, deberán presentar un certificado de alumno regular de un establecimiento educativo oficial.