Para pasar la ITV de un vehículo a motor, es necesario que este cumpla una serie de requisitos técnicos y de documentación. En cuanto a los requisitos técnicos, el vehículo debe tener una matrícula en regla, así como las luces, el claxon y los frenos debidamente regulados. Además, el vehículo no debe tener grietas en el cristal ni picaduras en el parabrisas que reduzcan la visibilidad.
En cuanto a la documentación, el vehículo debe estar debidamente registrado y el conductor debe estar en posesión del permiso de circulación y del certificado de inspección técnica de vehículos. Asimismo, se deberá presentar el justificante de pago de la tasa correspondiente.
La ITV es un control periódico obligatorio para todos los vehículos a motor que circulen por España. Su objetivo es comprobar que el vehículo cumple una serie de requisitos técnicos y de seguridad, para garantizar la seguridad vial. La ITV se realiza en centros especializados, donde se lleva a cabo un exhaustivo control del vehículo. Si el vehículo supera la ITV, se le entrega un certificado que lo acredita. En caso contrario, se le da un plazo para que se subsanen los defectos encontrados.