Para obtener la personería jurídica de una persona física o moral, se debe acreditar la capacidad legal para ello. En el caso de las personas físicas, se debe acreditar la mayoría de edad y plena capacidad de obrar. En el caso de las personas morales, se debe acreditar la existencia y representación legal.
Así mismo, se debe acreditar el nombre, domicilio y nacionalidad de la persona física o moral, así como la identidad y firma del representante legal. También se debe presentar el documento acreditativo de la constitución de la persona moral.
En el caso de las personas físicas, se debe presentar una identificación oficial con fotografía, como el pasaporte, la credencial para votar o la cédula profesional. En el caso de las personas morales, se debe presentar el acta constitutiva, los estatutos y el acuerdo de designación del representante legal.