La reforma migratoria es una prioridad para el presidente Barack Obama y para muchos estadounidenses. La ley de inmigración actual está obsoleta y necesita ser cambiada para que se ajuste a las necesidades de nuestro país. Obama ha hecho claro que la reforma migratoria es una de sus principales prioridades para el segundo mandato.
La reforma migratoria debería ser un proceso de tres pasos. En primer lugar, deberíamos mejorar la seguridad fronteriza. En segundo lugar, deberíamos simplificar y mejorar el sistema de inmigración para que las familias y las empresas puedan legalmente traer a trabajadores calificados al país. Y en tercer lugar, deberíamos dar a los inmigrantes indocumentados un camino a la ciudadanía, siempre y cuando cumplan ciertos requisitos y paguen una multa.
Ampliar y mejorar la seguridad fronteriza es una parte importante de cualquier reforma migratoria. Debemos asegurarnos de que los inmigrantes entren al país de manera segura y legal. También debemos asegurarnos de que los inmigrantes que ya están aquí legalmente no sean víctimas de crimen o de explotación laboral.
El sistema de inmigración también necesita ser mejorado. Actualmente, el sistema es muy complicado y difícil de navegar. Esto hace que sea difícil para las familias y las empresas traer a trabajadores calificados al país. Necesitamos un sistema que sea más simple y eficiente.
Finalmente, debemos dar a los inmigrantes indocumentados un camino a la ciudadanía. Esto es importante porque muchos inmigrantes han vivido en el país durante años, han formado familias aquí y han hecho una contribución significativa a nuestra economía. Debemos darles la oportunidad de convertirse en ciudadanos de Estados Unidos si cumplen ciertos requisitos y pagar una multa.