Para los trabajadores del sector privado, a partir del 1 de enero de 2019, se establece una edad mínima de 65 años para acceder a la pensión de jubilación. Hasta ahora, la edad mínima era de 60 años para las mujeres y de 65 años para los hombres.
Para los trabajadores del sector público, la edad mínima para acceder a la pensión de jubilación seguirá siendo de 60 años para las mujeres y de 65 años para los hombres.
En ambos sectores, la edad mínima se irá incrementando gradualmente en función de la esperanza de vida, de forma que en 2027 será de 67 años.
Otro cambio importante es que, a partir del 1 de enero de 2019, se exige un mínimo de 25 años de cotización para acceder a la pensión de jubilación, frente a los 15 años actuales. Asimismo, se establece una reducción de la pensión en función del número de años de cotización, de forma que quienes tengan menos de 25 años de cotización percibirán una pensión reducida en un 2% por cada año de cotización por debajo de los 25 años.
Estos cambios se aplicarán tanto a las personas que se jubilen a partir del 1 de enero de 2019 como a las que ya estén cotizando para la jubilación. Los trabajadores que, a 1 de enero de 2019, tengan entre 60 y 65 años de edad (hombres) o entre 60 y 60 años de edad (mujeres) y que cumplan los requisitos para jubilarse según la legislación vigente en ese momento podrán optar por jubilarse con las condiciones actuales o esperar a cumplir los requisitos que se establecen para 2027.