Para jubilarse en Bolivia, se requieren al menos 60 años de edad y 15 años de aportes al sistema de seguridad social. Además, se debe presentar la documentación necesaria, que incluye el certificado de nacimiento, el certificado de matrimonio y el certificado de defunción (en el caso de los viudos).
Los beneficiarios de la jubilación también deben estar al día con sus obligaciones tributarias y no tener deudas pendientes con el Estado. Para acceder a los beneficios, se debe presentar la solicitud de jubilación ante el Instituto de Previsión Social (IPS), junto con la documentación necesaria.
Una vez que se cumplen los requisitos y se presenta la solicitud, se realiza una evaluación médica para determinar si el solicitante está en condiciones de jubilarse. Si se aprueba la solicitud, se le otorgará una pensión mensual que será depositada directamente en la cuenta bancaria del beneficiario.