Para instalar Windows 11, necesitarás un procesador de 1 GHz o más rápido, 1 GB de RAM para la versión de 32 bits y 2 GB de RAM para la versión de 64 bits, 16 GB de espacio libre en el disco duro para la versión de 32 bits y 20 GB para la versión de 64 bits, y una tarjeta gráfica compatible con DirectX 9 con un controlador WDDM 1.0 o superior.
También necesitarás una conexión a Internet para la activación de Windows y para algunas funciones, como la instalación de aplicaciones de Windows Store y de los controladores de dispositivos necesarios para tu hardware.