Los cursos de formación no reglada son aquellos que no están regulados por un órgano oficial, como el Ministerio de Educación. Esto quiere decir que cualquiera puede impartirlos, siempre y cuando cumpla con los requisitos necesarios.
Para impartir un curso de formación no reglada, se debe tener un título de grado, licenciatura o diplomatura, o bien un certificado de profesionalidad de nivel 4 o superior. También se debe tener una experiencia mínima de dos años en la materia que se va a impartir.
Además, se debe tener un certificado de aptitud pedagógica, que se puede obtener tras superar un curso de formación específico o bien demostrando una experiencia mínima de tres años en la enseñanza.
Por último, se debe tener un certificado de acreditación lingüística del nivel C2 del Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas. Este certificado se puede obtener tras superar un examen oficial de nivel C2, como el DELE de nivel C2.