Los ciudadanos argentinos necesitan un pasaporte válido para ingresar a Italia. También se les exige que presenten un visado de turismo o de negocios, según el propósito de su visita. Los pasajeros en tránsito que no cumplan con estos requisitos no serán admitidos en el país. Los visitantes deben asegurarse de que sus pasaportes tengan una validez mínima de 3 meses antes de la fecha de salida de Italia. Además, los pasaportes deben tener al menos 2 páginas en blanco consecutivas para los sellos de entrada y salida. Los niños argentinos que viajan a Italia con pasaportes individuales también necesitarán un visado.
Los visitantes de Argentina que viajan a Italia con pasaportes de otros países deben verificar los requisitos de entrada y salida de acuerdo con su nacionalidad. Algunos pasajeros pueden necesitar permisos especiales para ingresar a Italia. Por ejemplo, los ciudadanos de determinados países de Asia y África necesitan un permiso de tránsito Schengen, que se puede solicitar a las autoridades italianas. Otros pasajeros pueden necesitar un visado de turismo o de negocios, según el propósito de su visita. Los visitantes deben asegurarse de que cumplen con todos los requisitos antes de iniciar el viaje.
Los ciudadanos argentinos pueden permanecer en Italia por un máximo de 90 días en un período de 180 días. Los visitantes deben asegurarse de que se encuentran en el país en el marco de este límite de tiempo. Si los visitantes exceden el límite de tiempo, pueden enfrentar cargos y multas. Los ciudadanos argentinos que desean permanecer en Italia por más de 90 días deben solicitar un permiso de residencia a las autoridades italianas. Los requisitos para obtener un permiso de residencia pueden variar según el propósito del visitante.