Para dar de baja un vehículo, debes acudir a la oficina de Tráfico con los siguientes documentos:
Una vez que se hayan tramitado todos los documentos, se procederá a la cancelación de la matrícula del vehículo. A partir de este momento, el vehículo dejará de estar registrado a tu nombre y, por lo tanto, no podrás circular con él. Además, una vez dado de baja, no podrás volver a darlo de alta, por lo que si quieres volver a conducirlo, deberás tramitar una nueva matrícula.