Para poder constituir una Asociación Sin Ánimo de Lucro (ASAL), es necesario que sus miembros reúnan una serie de requisitos y cumplan unos trámites. En primer lugar, deberán ser un grupo reducido de personas que se reúnan libremente y de forma voluntaria con un fin lícito que no persiga únicamente un interés personal. En segundo lugar, deberán estar de acuerdo en redactar y aprobar los estatutos de la asociación, en los que deberán reflejarse los siguientes requisitos:
Una vez se hayan aprobado los estatutos, será necesario que se inscriban en el Registro de Asociaciones del lugar donde vayan a tener su domicilio social. Para ello, se deberá presentar la siguiente documentación:
Una vez inscrita la asociación en el Registro, se le otorgará un número de identificación fiscal (NIF) con el que podrá realizar todos sus trámites. Es importante tener en cuenta que las ASAL no están sujetas al Impuesto de Sociedades, siempre y cuando cumplan los requisitos establecidos en la Ley.