Para cobrar la pensión de viudedad, el cónyuge viudo debe:
- Haber estado casado al menos un año con la persona fallecida.
- No estar divorciado o separado legalmente del difunto.
- No haber vuelto a contraer matrimonio o convivir con otra persona en una unión de hecho registrada.
- Ser mayor de edad o, si es menor, estar incapacitado para trabajar.
- No percibir una pensión por jubilación o invalidez, salvo en determinados supuestos.
En algunos casos es posible cobrar la pensión de viudedad aunque no se cumplan todos estos requisitos, como por ejemplo:
- Si el difunto tuvo hijos menores de edad o discapacitados a su cargo.
- Si era pensionista de guerra o viudo de un pensionista de guerra.
- Si era viudo de un trabajador por cuenta ajena o autónomo fallecido en activo y no percibía una pensión por jubilación o invalidez.