Para abrir una cuenta corriente en la mayoría de los bancos, se requiere un depósito inicial, que suele estar entre los 50 y los 100 euros. También se suele exigir un número de documento de identidad y un comprobante de domicilio. En algunos casos, también se puede abrir una cuenta con un justificante de ingresos y un número de teléfono.
Para abrir una cuenta corriente es necesario que tengas un documento de identidad. El DNI, el NIE o el pasaporte son los documentos habituales que se solicitan. También se puede abrir una cuenta con un certificado de empadronamiento, pero en este caso el banco te exigirá que acredites tu domicilio físico mediante otro documento, como una factura reciente.
Por lo general, se requiere un depósito inicial para abrir una cuenta corriente. Este importe suele estar entre los 50 y 100 euros, aunque algunos bancos no exigen ningún depósito. Si no dispones de este dinero, algunos bancos te permitirán abrir una cuenta con un justificante de ingresos.
Una vez que tengas todos los documentos necesarios, ponte en contacto con el banco de tu elección y solicita información sobre los requisitos para abrir una cuenta corriente. En la mayoría de los casos, bastará con rellenar un formulario y acudir a la oficina con tu documentación. También se puede abrir una cuenta online, aunque en este caso el banco te pedirá que acredites tu identidad mediante un vídeo llamada.