Para alquilar vivienda vacacional se necesita: identificación personal, comprobante de domicilio, referencias personales y/o profesionales, ingresos comprobables, avalista (si es necesario), seguro de hogar y seguro de responsabilidad civil. Todos los documentos deben estar al día y a nombre del inquilino. En algunos casos, el propietario puede pedir un depósito de garantía o un mes de alquiler como anticipo.
La identificación personal es obligatoria para alquilar una vivienda vacacional. Se aceptan pasaportes, DNI o permiso de residencia. El comprobante de domicilio puede ser una factura de luz, agua o gas, o un contrato de alquiler. Las referencias personales y/o profesionales son recomendaciones de personas que conocen al inquilino y pueden confirmar su solvencia. Los ingresos comprobables pueden ser un contrato de trabajo, una nómina o un certificado de discapacidad.
En algunos casos, el propietario puede pedir un avalista. Un avalista es una persona que se hace responsable del pago del alquiler en caso de que el inquilino no pueda hacerlo. El avalista debe tener ingresos comprobables y buen historial crediticio. Tanto el inquilino como el avalista deben firmar un contrato de aval.
Todos los inquilinos deben tener un seguro de hogar. El seguro de hogar cubre daños a la vivienda que puedan ser causados por el inquilino o por sus invitados. También cubre robo y incendio. El seguro de responsabilidad civil cubre daños a terceros que puedan ser causados por el inquilino o por sus invitados.
El propietario puede pedir un depósito de garantía o un mes de alquiler como anticipo. El depósito de garantía es una cantidad de dinero que se guarda como caucion en caso de que el inquilino cause daños a la vivienda. El mes de alquiler como anticipo es un pago adelantado que se descuenta del primer mes de alquiler.