Para alquilar un coche necesitarás una licencia de conducir válida. La mayoría de empresas de alquiler de coches exigen que tengas una licencia de conducir válida durante al menos un año. También necesitarás una tarjeta de crédito o débito para pagar el alquiler del coche. Si no tienes una tarjeta de crédito, algunas empresas de alquiler de coches te permitirán pagar con una tarjeta de débito, pero generalmente exigen un depósito más alto. Algunas empresas de alquiler de coches también te pedirán que presentes un comprobante de domicilio y una identificación con fotografía, como un pasaporte o un permiso de conducción.
Una vez que hayas reunido todos los documentos necesarios, llama a la empresa de alquiler de coches para hacer una reserva. Algunas empresas te permitirán reservar online, pero la mayoría requiere que hagas una reserva por teléfono. Asegúrate de tener en cuenta el número de teléfono de la empresa de alquiler de coches, así como el número de teléfono de tu lugar de alojamiento, ya que la mayoría de las empresas de alquiler de coches requieren que llames para confirmar tu reserva unas horas antes de tu llegada.
Una vez que hayas llegado a tu destino, busca la oficina de la empresa de alquiler de coches. La mayoría de las empresas de alquiler de coches tienen una oficina en el aeropuerto, pero algunas también tienen oficinas en el centro de la ciudad. Una vez que hayas encontrado la oficina, presenta tu licencia de conducir y tu tarjeta de crédito o débito. La empresa de alquiler de coches te dará las llaves del coche y te mostrará cómo funciona el coche. También te entregarán un mapa de la ciudad o la región, y te darán instrucciones sobre cómo llegar a tu alojamiento.
Una vez que hayas llegado a tu alojamiento, deja el coche en el aparcamiento y llama a la empresa de alquiler de coches para confirmar que has llegado safely.La mayoría de las empresas de alquiler de coches requieren que llames para confirmar que has llegado safely.La mayoría de las empresas de alquiler de coches requieren que devuelvas el coche con el mismo nivel de combustible que tenía cuando lo recogiste, así que asegúrate de llenar el coche antes de devolverlo.