El sistema de requisitos mínimos de Overwatch está diseñado para que la mayoría de los jugadores puedan jugar sin problemas. Sin embargo, para que la experiencia de juego sea lo más fluida posible, Blizzard recomienda encarecidamente que los jugadores tengan un sistema que cumpla con los requisitos recomendados. Overwatch requiere un procesador y un sistema operativo de 64 bits, además de Windows 7 u 8.1. El juego también requiere al menos 6 GB de RAM, DirectX 11 y una tarjeta de vídeo GeForce GTX 660 o Radeon HD 7950.