La ley de segunda oportunidad es una normativa que permite a las personas que hayan sido declaradas en concurso de acreedores la posibilidad de obtener una segunda oportunidad, para que puedan rehacer sus vidas.
Para poder acceder a la ley de segunda oportunidad, hay que cumplir unos requisitos:
- Haber sido declarado en concurso de acreedores.
- No haber sido condenado por un delito cometido con intención de causar daño a los acreedores.
- No haber sido condenado por un delito de estafa, de falsedad documental, de blanqueo de capitales o de delitos contra la Hacienda Pública.
- Haber cumplido con las obligaciones que se derivan del concurso de acreedores.
- Haber cumplido con las obligaciones tributarias pendientes con anterioridad a la declaración de concurso.
- No haber sido objeto de una medida de prohibición de contratar con la Administración por un delito cometido en el ejercicio de su actividad empresarial.
- No haber sido condenado por un delito de violencia contra la mujer.
La ley de segunda oportunidad tiene unos efectos muy beneficiosos para las personas que la solicitan:
- Eliminación de la deuda: las deudas que se hayan contraído con anterioridad a la declaración de concurso quedan extinguidas. No obstante, hay que tener en cuenta que las deudas que se contraigan a partir de la declaración de concurso no quedarán cubiertas.
- Posibilidad de obtener créditos: una persona que haya accedido a la ley de segunda oportunidad podrá obtener créditos por un importe máximo de 5.000 euros durante los cinco años siguientes a la finalización del concurso.
- Cese de las actuaciones ejecutivas: las actuaciones ejecutivas que se hayan iniciado contra la persona que haya sido declarada en concurso de acreedores quedarán paralizadas.
- Cese de las medidas cautelares: las medidas cautelares que se hayan adoptado contra la persona que haya sido declarada en concurso de acreedores quedarán sin efecto.
La ley de segunda oportunidad es una normativa muy beneficiosa para las personas que hayan sido declaradas en concurso de acreedores, ya que les permite obtener una segunda oportunidad para rehacer sus vidas.