La Ley de Dependencia de Andalucía se aplica a todas las personas de 65 años o más, independientemente de su nivel de renta, que tengan dificultades para realizar las actividades básicas de la vida diaria o para mantener una vida independiente y autónoma.
La Junta de Andalucía es la administración competente en materia de dependencia, y tiene la obligación de atender a todas las personas que cumplan los requisitos establecidos en la ley.
Para acceder a los servicios de la Ley de Dependencia, la persona interesada debe solicitar una valoración de necesidades a través de la oficina de información y atención al ciudadano de la Junta de Andalucía más cercana.
Una vez realizada la valoración, se elaborará un informe técnico en el que se determinarán las necesidades de atención de la persona y se establecerán los servicios que se le pueden ofrecer.
Estos servicios pueden ser de ayuda en el hogar, asistencia personal, acompañamiento, transporte, formación, teleasistencia o residencias de mayores.
La Junta de Andalucía cuenta con un Fondo de Solidaridad para atender a las personas con dificultades económicas que no puedan hacer frente a los costes de los servicios de dependencia.
Para acceder a este fondo, la persona interesada debe solicitarlo a través de la oficina de información y atención al ciudadano de la Junta de Andalucía más cercana.