La Ley de Dependencia establece un sistema de prestaciones a favor de las personas que tengan dificultades para llevar a cabo las actividades básicas de la vida diaria. El objetivo de la ley es mejorar la calidad de vida de estas personas y facilitar su inserción social.
Para acceder a las prestaciones de la ley, es necesario cumplir ciertos requisitos:
En el caso de las personas mayores de 65 años, los requisitos son los siguientes: