Los franceses pueden jubilarse a los 60 años de edad, pero deben haber cotizado durante al menos 40 años para recibir una pensión completa. Si no han cotizado lo suficiente, pueden recibir una pensión parcial. Aquellos que hayan cotizado durante menos de 10 años no recibirán ninguna pensión. Todos los trabajadores cotizan al sistema de jubilación de Francia, que es administrado por el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).
Para calcular la pensión, se toma en cuenta la edad del trabajador, los años de cotización y el salario promedio de los últimos años. Las personas que hayan cotizado durante más de 40 años recibirán una pensión equivalente al 100% de su salario promedio. Aquellos que hayan cotizado entre 35 y 39 años recibirán una pensión equivalente al 90% de su salario promedio, mientras que aquellos que hayan cotizado entre 30 y 34 años recibirán una pensión equivalente al 80% de su salario promedio. Las personas que coticen entre 10 y 29 años recibirán una pensión equivalente al 50% de su salario promedio.
Los franceses pueden jubilarse anticipadamente a los 62 años de edad, pero deben haber cotizado durante al menos 20 años. Si no han cotizado durante el tiempo suficiente, no recibirán ninguna pensión o recibirán una pensión reducida. Aquellos que hayan cotizado durante más de 20 años recibirán una pensión equivalente al 100% de su salario promedio. Aquellos que hayan cotizado entre 15 y 19 años recibirán una pensión equivalente al 80% de su salario promedio, mientras que aquellos que hayan cotizado entre 10 y 14 años recibirán una pensión equivalente al 60% de su salario promedio.