Para ser funcionario de prisiones, se requiere:
- Tener 18 años de edad como mínimo.
- Estar en posesión del título de Graduado en ESO o equivalente.
- No padecer enfermedad o minusvalía física o psíquica que imposibilite el correcto desempeño de las funciones.
- No haber sido condenado/a por delitos dolosos.
- No tener antecedentes penales que impidan el ingreso a la función pública.
- Estar en posesión del Permiso de Conducir B.
- No haber sido separado/a mediante expediente disciplinario del servicio de cualquier Administración Pública.
- Estar en posesión del Título de Vigilante de Seguridad, Técnico Superior en Seguridad Privada o equivalente.
Para optar al puesto de funcionario de prisiones, los aspirantes deberán superar un proceso de selección que constará de las siguientes pruebas:
- Prueba de conocimientos.
- Evaluación psicológica.
- Prueba física.
- Exploración médica.
- Prueba documental.