La querella policiva es una de las formas de iniciar un proceso penal en España, según el artículo 120 del Código Penal. Se puede presentar ante la Policía o Guardia Civil, y es necesario hacerlo por escrito. Es importante detallar los hechos de forma clara y concisa y identificar a la persona contra la que se dirige la querella.
La Policía o Guardia Civil actuarán de oficio si consideran que existen indicios de delito. Si no lo consideran o si el delito es de faltas, remitirán la querella a la Fiscalía. Ésta es la que decidirá si se incoará o no procedimiento penal.
En la querella debe constar:
Si la Policía o Guardia Civil no actuaran de oficio, la querella deberá ser impulsada por abogado y procurador.