La compraventa de inmuebles es una operación muy compleja que requiere de una serie de requisitos y documentos. En primer lugar, es necesario que el comprador y el vendedor sean mayores de edad y tengan capacidad legal para contratar. Además, se debe hacer constar en el contrato de compraventa el precio acordado, así como la descripción del inmueble. Asimismo, es necesario que el inmueble esté libre de cargas y gravámenes, y que el vendedor sea el legítimo propietario.
Para la formalización de la compraventa, es necesario que el vendedor y el comprador acudan ante un notario, quien extendrá la escritura pública. En ella se hará constar el precio de venta, la descripción del inmueble, así como los derechos y obligaciones de las partes. Es importante que ambos contratantes leyeran detenidamente la escritura pública antes de firmarla, ya que una vez extendida y firmada por ambas partes, será vinculante para ambas.
Una vez que la compraventa quede formalizada ante notario, es necesario que el comprador haga efectivo el pago del precio acordado. A partir de ese momento, el inmueble quedará a nombre del comprador, quien será el legítimo propietario. Es importante que se haga constar en el contrato de compraventa el modo en que se realizará el pago, ya que de lo contrario, el vendedor podrá exigir el pago en cualquier momento.