Los administradores de fincas tienen la responsabilidad de gestionar y supervisar las actividades relacionadas con el mantenimiento, la conservación y la administración de los inmuebles, así como de los servicios que se presten en ellos. Para ejercer esta profesión, es necesario estar colegiado en el correspondiente colegio profesional.
Para obtener la colegiación, los aspirantes a administradores de fincas deben:
Una vez superados estos requisitos, los aspirantes deberán superar un examen de ingreso que evalúa los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para el ejercicio de la profesión. El examen se divide en dos partes:
Una vez superado el examen de ingreso, el aspirante deberá presentar la documentación necesaria para obtener la licencia de administrador de fincas. Esta documentación deberá ser presentada ante el colegio profesional correspondiente. La licencia de administrador de fincas es personal e intransferible, y debe ser renovada cada 5 años.