Para alquilar un piso es necesario cumplir una serie de requisitos, entre ellos se encuentra que la persona que vaya a alquilar el piso debe tener una renta mínima establecida por la ley, además de contratar un seguro de hogar que cubra los daños que pudiera causar el inquilino durante su estancia en el piso. También se exige un aval por parte de una persona física o jurídica que garantice el pago del alquiler y los gastos derivados del mismo. En algunos casos, el propietario del inmueble puede pedir un depósito adicional a modo de garantía.
Para solicitar el alquiler de un piso es necesario rellenar una solicitud de alquiler en la que se detallan datos personales del interesado, así como los datos del inmueble que se va a alquilar. También se debe adjuntar un justificante de ingresos que acredite que se dispone de los recursos necesarios para hacer frente al pago del alquiler.
Una vez que se ha entregado la solicitud de alquiler al propietario o a la persona encargada de gestionar el alquiler, este tendrá un plazo de 10 días para aceptar o rechazar la solicitud. Si la solicitud es aceptada, se firmará un contrato de alquiler en el que se especificarán todas las condiciones del alquiler, como por ejemplo, el importe del alquiler, el plazo del alquiler, las obligaciones del inquilino, etc.