La acción de regreso es una acción legal que permite a una persona demandar a otra persona por daños y perjuicios causados. La acción de regreso se puede presentar tanto en una demanda civil como en una demanda penal. En una demanda civil, la acción de regreso se puede presentar cuando se ha sufrido un daño físico o material, como un accidente de coche, o cuando se ha sufrido un daño moral, como una agresión. En una demanda penal, la acción de regreso se puede presentar cuando se ha sufrido un delito, como una agresión o un robo.
Para presentar una acción de regreso, es necesario que se cumplan ciertos requisitos. En primer lugar, es necesario que se haya sufrido un daño. El daño puede ser físico, material o moral. En segundo lugar, es necesario que el daño haya sido causado por la persona contra la que se presenta la demanda. En tercer lugar, es necesario que el daño no haya sido causado por culpa propia. Y en cuarto lugar, es necesario que el daño no haya sido causado por un tercero. Si se cumplen todos estos requisitos, se puede presentar una acción de regreso.