Para trabajar en cualquier empresa, se requieren una serie de requisitos, ya sean de índole personal o profesional. En primer lugar, es necesario tener una buena actitud, ser una persona proactiva y estar dispuesto a trabajar en equipo. También es importante cumplir con los horarios y realizar las tareas asignadas de la mejor manera posible. Otro requisito fundamental es tener iniciativa, es decir, estar dispuesto a aprender nuevas cosas y enriquecer el trabajo con nuevas ideas. Asimismo, es imprescindible ser responsable y cumplir con las obligaciones adquiridas. Por último, pero no por ello menos importante, es necesario tener flexibilidad, es decir, estar dispuesto a adaptarse a los cambios y a trabajar bajo presión.