Para solicitar una hipoteca, necesitarás reunir una serie de requisitos que te permitan demostrar tu capacidad de pago. Algunos de estos requisitos son:
Tener un ingreso mínimo que te permita hacer frente a las cuotas del préstamo hipotecario.
No tener deudas pendientes de pago, o que el importe de estas deudas no sea superior al 30% de tus ingresos mensuales.
Aportar una cantidad inicial, que suele ser del 10% del valor de la vivienda.
Contratar un seguro de vida que cubra el importe del préstamo en caso de fallecimiento.
Contratar un seguro de hogar que cubra los daños que se pudieran producir en la vivienda.
En algunos casos, se pueden exigir otros requisitos adicionales, como que la vivienda esté en unas determinadas condiciones o que se contrate un seguro contra incendios.