Para ser policía nacional en España se requiere, en primer lugar, ser español o tener la nacionalidad de un miembro de la Unión Europea. También se requiere tener entre 18 y 30 años, estar en posesión de un título universitario de grado medio o superior, no haber sufrido condena por un delito doloso y superar una serie de pruebas físicas, psicológicas y médicas. También se requiere que el solicitante no haya sido separado del servicio por falta grave ni haya sido objeto de sanción disciplinaria por falta muy grave en los cinco años anteriores a la solicitud.
Para ingresar en la Academia de Policía, el solicitante deberá superar un examen de selección que evalúa sus conocimientos en lenguas, informática, historia de España, geografía, derecho constitucional, derecho penal, psicología, psicotécnicos, inglés y otros. Los candidatos con mejor puntuación en el examen de selección serán admitidos en la Academia de Policía.
Una vez que los nuevos policías hayan completado satisfactoriamente sus estudios en la Academia de Policía, recibirán un diploma y serán asignados a un destino en función de sus conocimientos y habilidades. Los policías nacionales pueden solicitar el traslado a otro destino en cualquier momento de su carrera.