Para ser inspector de sanidad se requiere, en primer lugar, tener un título universitario de Grado en Medicina o en Veterinaria. En segundo lugar, es necesario superar una oposición convocada por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, en la que se evalúan conocimientos en materia de higiene, sanidad, legislación sanitaria, toxicología y legislación alimentaria. También se valora la capacidad de gestión, el dominio de idiomas y la experiencia profesional.
Una vez superada la oposición, el inspector de sanidad recibe una formación específica en el área de actuación que le ha sido asignada. Los inspectores de sanidad pertenecen a la carrera administrativa especial de sanidad, lo que les permite acceder a puestos de mayor responsabilidad en el ministerio o en otras administraciones públicas.
La función del inspector de sanidad consiste en velar por el cumplimiento de la legislación sanitaria y alimentaria, así como de las normas de higiene y seguridad. Para ello, realiza inspecciones periódicas a establecimientos de hostelería, restaurantes, comercios, industrias y otros espacios publicos. También se encarga de investigar posibles incumplimientos y de impulsar las acciones correctoras necesarias.
El salario de un inspector de sanidad en España es de aproximadamente 2.000 euros al mes, aunque puede variar en función de la antigüedad, la categoría y el área de actuación.