La excedencia por cuidado de familiares es una modalidad de ausencia del puesto de trabajo que permite compatibilizar la vida laboral y familiar. Se trata de un derecho reconocido a todos los trabajadores por ley, tanto hombres como mujeres.
En el caso de los funcionarios, el derecho a la excedencia está regulado en el estatuto básico del empleado público, en su artículo 38.
Para poder acceder a esta modalidad de ausencia, los funcionarios deben cumplir una serie de requisitos establecidos en la ley, entre los que se encuentran:
Para solicitar la excedencia por cuidado de familiares, el funcionario deberá presentar una solicitud formal en la que se especifiquen los datos del familiar a cuidar, así como el motivo por el que se solicita la excedencia. La solicitud deberá ser dirigida a la jefatura de departamento o al órgano competente de la administración para la que trabaja el funcionario.
Una vez concedida la excedencia, el funcionario podrá reincorporarse a su puesto de trabajo en el plazo de un año desde la fecha en la que se inició la ausencia, siempre y cuando se cumplan las mismas condiciones en las que se concedió la excedencia.