Para adquirir la ciudadanía portuguesa, se deben cumplir unos requisitos previos. En primer lugar, es necesario tener nacionalidad portuguesa. Esto puede conseguirse de diversas maneras: por nacimiento, matrimonio con un ciudadano portugués, mediante adopción o por naturalización.
En segundo lugar, es necesario residir legalmente en Portugal. Para ello, se debe tener un permiso de residencia válido y estar inscrito en el Registro de Ciudadanos de Origen Comunitario.
Además, es necesario tener 18 años de edad o estar emancipado. Y es necesario no tener antecedentes penales en Portugal o en cualquier otro país.
Por último, es necesario saber hablar y escribir portugués. No obstante, esta exigencia se puede dispensar a aquellas personas que no tengan la capacidad física o mental suficiente para aprender el idioma.